Reseña | ‘House of the Dragon’ Ep. 6:’La Princesa y la Reina’

Diez años después. Rhaenyra lidia con las constantes especulaciones de Alicent sobre sus hijos. Entretanto, Daemon y Laena evalúan una oferta en Pentos.

Estamos en la segunda mitad de temporada de House of the Dragon y justo como lo decía la semana pasada, este es un nuevo comienzo. Diez años han pasado entre un episodio y otro y se debe poner a la audiencia al tanto de todo lo que ha sucedido en este tiempo para establecer la trama de los siguientes capítulos. Es una nueva introducción que en buena parte es efectiva, pero también revela algunos problemas con la serie que anteriormente no eran aparentes.

Lo que funciona perfectamente este episodio es la forma en la que nos muestran como la enemistad entre Rhaenyra y Alicent se ha agravado con el tiempo. Tan solo la primera secuencia nos dice como entre ellas hay una terrible tensión de la que todos son víctimas.

A lo largo del episodio se presentan situaciones en las que vemos como Alicent, ya casi declarada antagonista, se esfuerza en manipular a la gente cercana a ambas para dejar claro quien está de lado de quien. Los lectores de los libros de la saga de Canción de Hielo y Fuego saben muy bien hacia que gran evento se dirige House of the Dragon. Quienes no lo saben, es hora de poner más atención que nunca.

Emma D’Arcy y Olivia Cooke como se esperaba hacen un excelente trabajo como las versiones mayores de Rhaenyra y Alicent, logran que se sientan como mujeres ya diferentes, pero que a la vez mantienen la esencia de las personajes como las conocimos al inicio.

(Spoilers adelante)

Sin embargo hubo momentos que hicieron sentir que el salto de diez años no le hizo un gran favor a la serie, sino al contrario, limitó ciertos aspectos de la historia y los personajes. En especial con el trato que se le dio a personajes como Laena Valeryon y Harwin Strong, quienes en este salto formaron relaciones con Daemon y Rhaenyra respectivamente.

Poco podemos ver de estas relaciones antes de que estos personajes perecen al final del episodio, lo que pudieron ser momentos emocionalmente impactantes, pasan casi desapercibidos, pues son personajes que fueron relegados al fondo y de un momento a otro se les quiso trata como principales. Por eso es un problema que no era aparente hasta ahora, no sabíamos que en algún punto estos personajes tendrían gran importancia y resulta que sí ¿Qué otros sufrirán el mismo destino y aún no lo sabemos?

Así que ojalá que este sea el último gran salto de tiempo en la historia de House of the Dragon, porque nos están alejando de momentos importantes para sus personajes y su desarrollo. Habría sido mejor si hubiéramos podido ver un poco más de lo que sucedió en ese tiempo. Este no fue realmente un gran episodio de House of the Dragon, pero tampoco un tropiezo grave, así que seguimos con muchas ganas de ver lo que nos deparan los siguientes episodios.