Reseña | ‘High School Musical: El Musical: La Serie’, Temporada 4

Es hora de que los Wildcats hagan su último partido en High School Musical: El Musical: La Serie, misma que regresó a Disney+ para su cuarta y última temporada. La última vez que vimos a los personajes, no estaban bailando por los pasillos de East High, sino asando malvaviscos y manifestando sus Elsas interiores en el lago. En la temporada 3, el grupo se dirigió al campamento durante las vacaciones de verano donde montaron una producción de Frozen, pero había algo más en juego que nunca. En un extraño giro que sólo podría suceder en el mundo de High School Musical, el propio Corbin Bleu está dirigiendo una docuserie que sigue a los Wildcats durante su producción musical.

La cuarta temporada inicia con un nuevo año con los Wildcats todavía inseguros por las secuelas de las docuseries. Gina y Ricky son, a todos los efectos, la nueva pareja “woke”, pero mantienen en secreto su noviazgo. Ashlyn todavía está tratando de descubrir quién es y qué es lo que realmente quiere después de su salida del clóset durante la ida al lago. Kourtney está disfrutando de sus nuevos 15 minutos de fama del documental mientras le llegan todas las solicitudes para la universidad. Carlos y Seb están luchando para lidiar con las consecuencias del tráiler de la docuserie que hizo que pareciera que Carlos hizo trampa durante las vacaciones. Mientras tanto, también vemos el regreso de algunas caras nuevas de la temporada anterior, que incluyen a Emmy, y el dúo de hermanos Maddox y Jet, los cuales han encontrado su camino.

La cuarta temporada también trajo de vuelta algunos personajes favoritos, incluidos Corbin Bleu, Monique Coleman, Lucas Grabeel, Kaycee Stroh, Bart Johnson y Alyson Reed. Los Wildcats originales han regresado a East High para filmar la secuela más reciente en la saga de películas de High School Musical, High School Musical 4. Para que la película parezca lo más auténtica posible, le han pedido a los niños de Miss Jenn aparecer como extras en la película. Por supuesto, esto crea una oportunidad para locuras del grupo, mientras los Wildcats intentan equilibrar su filmación para HSM4 con la producción teatral de Miss Jenn de High School Musical 3. Justo cuando pensabas que High School Musical: El Musical: La Serie no podía volverse más meta, y de alguna manera salirse con la suya, la temporada nos da mucha información sobre el futuro de los personajes de las películas originales.

Con los Wildcats de regreso en East High, la cuarta temporada ya dio un paso adelante de lo que fue la tercera. Una parte muy indispensable de la fórmula que hace que una serie tan conocida como High School Musical: El Musical: La Serie realmente funcione, es su escuela. Desafortunadamente, la serie perdió gran parte de su encanto en la temporada anterior con las vacaciones del cast principal fuera del campus, especialmente con varios de sus personajes principales sin aparecer. Por lo tanto, ver a los Wildcats de regreso en los pasillos de East High esta temporada es ciertamente agradable de ver. Sin embargo, desafortunadamente, la cuarta temporada no corrige todos los errores de la anterior.

Lo que siempre ha hecho que High School Musical sea una franquicia tan divertida es lo pequeño que está en juego. Se trata de niños que literalmente montan una producción musical en una escuela, pero actuando como si toda su vida dependiera de su éxito. Las lágrimas se notan en sus rostros, las amistades se destruyen, los romances surgen y se caen, pero al final del día, el show debe continuar. Y lo hacen, generalmente con canciones originales que pintan en lo mediocre. El musical de la escuela comienza con un problema, se cierra el telón y todo el grupo aprendió algo nuevo sobre la vida. No aporta nada a la trama principal.

La cuarta temporada, desafortunadamente, por ratos olvida la fórmula que la llevó al éxito. Al igual que en la temporada anterior, la serie intenta ir en grande: ya que no se trata de que los personajes simplemente hagan una producción escolar, sino más bien de que tengan su oportunidad de alcanzar la fama. Es cierto que esto funcionó perfectamente bien con el personaje de Nini, interpretada por Olivia Rodrigo, pero siempre hay un personaje garantizado para hacer cosas más grandes. Y en el caso de Nini, era inevitable con la inmensa popularidad de la actriz. Pero no funciona cuando se trata de todo el elenco, especialmente cuando sucede dos veces.

Dicho esto, la última temporada da un giro sorprendentemente bueno a mitad de los episodios. Una vez que la serie vuelve a centrarse en sus personajes y sus problemas de la vida real fuera de la “fama”, aquí es donde demuestran su potencial. La subtrama de Ashlyn para comprender su sexualidad y las decisiones universitarias de Kourtney, por ejemplo, son lo más destacado de esta temporada. Incluso Ricky, a quien la serie no le da nada que hacer excepto ser un novio con mal temperamento, o peor aún, ser un chico soltero que no respeta las relaciones de los demás porque quiere estar con una chica que no lo es. En realidad se le da más profundidad esta temporada. Cuando la serie recuerda que Ricky tiene serios defectos, desde problemas de abandono hasta un sentido poco claro de sus propias metas a futuro, ahí es cuando Ricky realmente se vuelve interesante.

Como siempre, el aspecto menos interesante de la temporada es la pareja principal, pero está bien. No importa quién sea la pareja: Ricky y Nini, Gina y EJ, y en este caso, Ricky y Gina: la historia que rodea a la pareja principal simplemente nunca es tan convincente ni lo suficientemente interesante. Pero al igual que las temporadas anteriores, la última logra dar a los personajes secundarios suficiente profundidad para sobrellevar la historia. Miss Jenn, en particular, sigue siendo lo más destacado de la serie. Su sentido cómico sigue siendo impecable y su amor por “sus bebés” se siente tan genuino que es difícil verla perder tanto tiempo con ellos, especialmente en su último año.

La temporada todavía le brinda algunos momentos conmovedores de mentor uno a uno con sus linces que nos recuerdan cuán lejos ha llegado el club de drama desde la primera temporada. También hay una aparición especial en un episodio de un personaje cuyo crecimiento es quizá el mejor de la serie en todas las temporadas.

En general, la última temporada de High School Musical: El Musical: La Serie no comienza de la forma correcta, pero encuentra su equilibrio en la segunda mitad, ya que recuerda lo que hace que la serie sea tan interesante de ver. La música no es tan buena como en las dos primeras temporadas. Sin embargo, lo que da un crecimiento en esta temporada permanece en sus personajes, en particular cuando encuentran el camino de regreso a su hogar: el escenario de East High, haciendo una última reverencia después de su último musical de la escuela.