Reseña | ‘How I Met Your Mother’

Y así niños, fue como conocí How I Met Your Mother.

Facebook está lleno de memes y frases de esta serie. O al menos mi pantalla de inicio siempre se llena de contenido de How I Met Your Mother. Esto propició que comenzara a verla. Mi prejuicio desde un principio fue su similitud con Friends y que su historia no daba para nueve temporadas (209 capítulos para ser exactos). Por lo que decidí adentrarme en este mundo y ver la serie completa. Cosa que logré en tan solo 21 días (con dos días de descanso entre las temporadas 6 y 7).

ATENCIÓN: Spoilers a continuación.

El gran error de esta serie es ser muy larga. Esta es una historia que se pudo resumir en 5 o 6 temporadas y habría sido toda una obra maestra. Sin embargo, al contener tantos capítulos, gran parte de éstos son relleno y que poco o nada aportan a la historia principal.

Mientras que las primeras tres temporadas son magníficas, es a partir de la cuarta donde se siente un gran declive, pero esto no significa que la serie ya no tuviera momentos brillantes, al contrario, tiene grandes y excelentes capítulos, que a final de cuentas, son opacados ante episodios flojísimos. Algunos personajes se estancan para que otros se desarrollen, y cuando hay desarrollo, en algunas ocasiones al siguiente capítulo el personaje reacciona de manera indiferente ante cierta situación y capítulos después vuelve a tener desarrollo.

Ese es otro problema: la inconsistencia de los escritores. Los personajes tienen muchos, muchos altibajos, los chistes llegan a repetirse tal cantidad de veces que dejan de ser graciosos, se ve la misma trama de un episodio una y otra y otra vez que pierden la gracia y hasta se pueden saltar sin perderse nada. En momentos pareciera que la serie no va a ningún lado y no está pasando algo en pantalla.

Y el golpe de gracia es la novena temporada. Que se nota a leguas improvisada y que decidieron hacerla porque sí. Para hacer una temporada entera que solo abarque dos días de los personajes, tienen que ser bastante inteligentes (incluso a 24 la fórmula se le desgastó). Tiene episodios completamente innecesarios; el mejor ejemplo es ese donde Marshall tiene que narrarle historias de dormir a su hijo para que éste logre dormirse y hacer más ameno su viaje en autobús a Nueva York. Esta temporada es un problema porque el plan original eran ocho temporadas, incluso Jason Segel quería deslindarse ya de la serie. Pero no, decidieron hacer una temporada entera de algo que pudo resumirse en 10 o menos capítulos. Además, es la temporada donde quieren dar enormes pasos en la historia, en el desarrollo de personajes y demás. El ejemplo de esto, que demuestra demasiado la ya mencionada inconsistencia de los escritores, es cuando Robin le dice a Ted que debía casarse con él.

Otra decepción, que demuestra que los escritores eran iguales o peores que los de Lost, es que Ted logra su sueño de tener un edificio en Manhattan. ¿Y luego? La serie nunca, nunca le da la debida importancia al sueño realizado de Ted. Solo lo ponen como un detalle insignificante que sucede y ya, a voltear la página. Se acompaña con el detalle del regreso de Victoria, porque a nadie se le ocurrió una manera mejor de resaltar el conflicto de Ted y Robin que volver a un personaje antiguo el cuál ya tenía una buena conclusión.

Y el final… Desde Lost o Dexter no veía un final que descompusiera todo lo que se construye tras una serie entera. ¿El desarrollo de Barney como persona a un hombre maduro? Mandado al carajo tras una decepción amorosa, luego de eso intentan arreglarlo con una emotiva escena con su hija, que queda muy mal. ¿La evolución de Robin de una antisocial enfocada en su carrera a una persona emotiva y con amigos? Mandado al carajo tras su divorcio. ¿El excelente capítulo donde Ted deja ir a Robin y vemos a ella irse en el aire? Arruinado gracias al final. Todo eso que se construyó durante casi una década, fue mandado al carajo por capricho de los creadores. El personaje de la Madre es algo bueno, pero incluso ni siquiera le dan tiempo al espectador de encariñarse con ella, su muerte no afecta ni en lo más mínimo al público. Solo muere y listo. Y, oh sí, el insultante final. Que aparte de arruinar por completo a Barney y a Robin, nos dan algo completamente anticlimático haciendo que Ted se quede finalmente con Robin.

Los creadores dieron una explicación sensata respecto a ello, pero ni siquiera logra ser efectiva por lo repentino que todo sucede. Intentan justificar ese detalle con un monólogo con voz en off sobre el amor y la vida, pero es tan insípido que no sirve para justificar tal error. Esto está mejor llevado en el final alternativo, que si bien es el final de lo más predecible, es el que funciona dentro del contexto de la serie y redime de manera perfecta la búsqueda de Ted de la que trataba la serie. Lamentablemente, es alternativo y ni siquiera queda dentro del canon. Que los creadores digan “los fans que escojan el que más les guste”, suena muy a Mass Effect 3, que tras regalarla con el final original, van y sacan un contenido descargable para arreglar la conclusión de la saga; eso se llama vender humo.

En conclusión, aunque el humor funciona, el hecho de que sea demasiado larga hace que la trama canse y en ocasiones aburra (bien se podía ver con el celular en la otra mano y no se pierde uno de nada), de hacerse mas corta, y siendo más directa, habría funcionado mejor. Debido a esto, y tras haber amado las primeras tres temporadas, no me queda otra que decir que fue una serie que está entre lo mediocre y lo bueno, con un final que acompaña al de Lost y Dexter. Una lástima, pues pudo haber sido una obra maestra.

Para mí, ésto debió ser How I Met Your Mother:

Temporadas 1, 2 y 3.
Los primeros 8 capítulos de la cuarta.
Los primeros 9 de la quinta.
Un resumen a lo anime de las temporadas 5, 6 y 7.
La segunda mitad de la octava.
El final alternativo.

Creadores: Carter Bays & Craig Thomas
Directores: Pamela Fryman, Rob Greenberg, Michael J. Shea & Neil Patrick Harris
Elenco principal: Josh Radnor, Jason Segel, Cobie Smulders, Neil Patrick Harris, Alyson Hannigan, Lyndsy Fonseca & David Henrie