Reseña | ‘El Libro de la Selva’

“Kid, I got ears. My ears got ears. Only I can protect you.”
Pues acabo de tener la oportunidad de ver la nueva adaptación de ‘El Libro de la Selva’ de manos de Disney, y debo decirles que es muy buena.
Si son lo suficientemente viejos recordarán la película animada que salió hace ya varios ayeres, y si son aún mas viejos, recordarán el cuento… Pues me da mucho gusto que por fin existe una adaptación en la que podemos ver lo mejor que tenían ambas cosas de antaño, en un film para toda la familia con el tono algo oscuro y maduro que tiene el libro homónimo.
La película básicamente sigue la historia de Mowgli (Neel Sethi), narrada desde los ojos de la pantera Bagheera (Ben Kingsley). Mowgli es un pequeño niño que fue adoptado por una manada de Lobos y acogido por Raksha, (Lupita Nyong’o) la hembra alfa, y por Akela, (Giancarlo Esposito) el macho alfa de la manada. Mowgli tuvo que aprender desde pequeño la ley de la selva y así cada tanto competir por un espacio en la manada, pero por desgracia él no es un lobo, así que las pruebas son prácticamente imposibles de realizar con éxito. Entonces cae una sequía y como las leyes de la selva así lo dictaban, todos los animales entraban en una tregua para poder beber agua del mismo río y ahí, cuando todos se encuentran “conviviendo” aparece nuestro antagonista… Shere Khan, el tigre marcado por la “flor roja” (Idris Elba). El odia a los humanos y dicta un ultimátum para Akela, cuando la sequía pase él irá a por Mowgli, así que después de celebrar una junta se decide que éste tendrá que ir a la aldea humana mas cercana ya que es la única manera de permanecer a salvo de las garras del vengativo tigre de bengala.
Después de estar cerca de la muerte a “manos” de Kaa, la boa (Scarlett Johansson), nuestro protagonista conoce al simpático oso Baloo (Bill Murray) que será su mentor en una filosofía muy interesante “se el mejor en lo que tú sabes hacer”. Y así inicia la aventura del pequeño Mowgli, quien pronto conocerá al señor de Bandar-log, al Rey Louie (Christopher Walken), un Orangután gigante que quiere aprender como crear “la flor roja” para ser igual a un humano.
La película nos trae detalles tanto del libro como del film animado de Disney, detalles muy pequeños como que Mowgli está lleno de cicatrices a causa de jugar a ser un lobo y detalles que pegan directo en la nostalgia, como volver a escuchar temas como “Busca lo más vital”, “Confía en mí” y “Quiero ser como tú”, temas que cualquier persona que haya visto la película animada estará mas que feliz de volver a escuchar.
La fotografía es hermosa, hay momentos en los que se te puede olvidar que prácticamente todo es CGI, de la misma manera que puedes notar una esencia de los actores que doblan su voz a los animales al ver sus ojos.
‘El Libro de la Selva’ viene a pegarnos muy duro en la nostalgia y nos deja una bonita experiencia. Ha sido, en lo que va del año, la mejor película que he visto… Una película que me ha dejado con una enorme sonrisa y con muchas ganas de repetir. “No matter where you go or what they may call you, you will always be my son.” –Raksha
Tetazo de corazón. Warsie. Amante de la pizza, la cerveza y el PostPunk. Goth de closet. Coleccionista de diferentes cosas, Star wars, búhos y cráneos en su mayoría. Gamer casual y adicto a Instagram.
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