Reseña | ‘Hazme el Favor’ (No Hard Feelings)
Una comedia como las de antaño.

A punto de perder la casa en la que creció, Maddie (Lawrence) descubre un intrigante anuncio clasificado de un trabajo: padres helicóptero millonarios buscan a alguien para poder “salir” con su hijo introvertido de 19 años, Percy, antes de que se vaya a la universidad. Para su sorpresa, Maddie, pronto descubre que el extraño Percy no es una cosa segura.
Con la llegada de los universos de superhéroes vinieron muchos cambios radicales para toda la industria del cine. Uno de ellos es la pérdida de las comedia de presupuesto medio y en especial esas comedias de muy mal gusto, sexualizadas, groseras, pero muy divertidas. Por eso ya no vemos películas como American Pie o ¿Qué Paso Ayer? en el cine, si a caso una que otra en plataformas de streaming, sin embargo suelen ser de una calidad deplorable. ¿Qué se necesita para traer este tipo de películas de regreso a la pantalla grande? Pues un buen paso es traer de regreso a una de las últimas estrellas de cine que quedan en la industria como Jennifer Lawrence para protagonizar una comedia de este tipo, tal vez así vuelvan a ser un éxito. Esa película es Hazme el Favor, que llegó a cines del país este fin de semana.
Uno de los grandes puntos a favor de Hazme el Favor es que tiene una trama que raya en lo problemático, pues en el cine comercial ya no tenemos películas que deliberadamente crean premisas alrededor de situaciones incómodas, sensibles o peligrosas porque los estudios le temen demasiado a la malinterpretación de la audiencia y sus consecuencias, pero Jennifer Lawrence (como productora) y el director Gene Stupnitsky no le temen a la funa.
Sin embargo eso tampoco significa que se dedican a tratar de ofender a todas las personas en la sala, de hecho esta película es otra prueba de que se puede hacer comedia negra de mal gusto sin necesidad de impulsar ideologías retrógradas. La situaciones que vemos en Hazme el Favor son reprobables para cualquier persona sensata y aún así resultan extremadamente graciosas porque Stupnitsky las dirige consciente de que son lo que son, sin juzgar ni tratar de moralizar a la audiencia. Y es que si bien es importante traer de regreso estas comedias, también es importante reconocer que muchas de ellas eran productos de su época y que tienen material que al día de hoy no sería bueno replicar.
En el caso de Hazme el Favor, cuya trama bien podría ser la fantasía sexual de cualquier adolescente hombre, sería muy fácil que el material del guion cayera en la misoginia y estoy seguro que de haber sido una película hecha antes del 2010, así habría sido. Sin embargo Stupnitsky sabe en que momentos debe contener la agresividad de su material y no caer en verdaderas conductas reprobables y esto sin comprometer en lo absoluto el valor cómico de la película. Tarea más difícil de lo que suena, pero con la cantidad de risas que escuché, creo que lo logra.
Y es que no es solo por su comedia, también en cuestión de su historia, pues la película bien se pudo haber contado desde una perspectiva masculina o enfocarse demasiado en el co-protagonista hombre, sin embargo con una actriz como Lawrence al frente era necesario darle suficiente profundidad a su personaje para que se le sacara provecho a sus habilidades como actriz y de hecho si la tiene, pues el arco de Maddie es sólido y hasta cierto punto conmovedor. Lawrence utiliza un poco de ese carisma por el que la conocemos públicamente y lo combina con la personalidad de su personaje, llegando al punto en que se vuelve difícil discernir una de otra, al puro estilo de actuación de una verdadera estrella de cine. ¿Pero qué sería de Lawrence sin su co-protagonista? Con pocos papeles en su filmografía, Andrew Barth Feldman logra ponerse al tú por tú con Lawrence, lo que da paso a una química inigualable, graciosa, romántica, amistosa, la película siempre está en su mejor forma cuando ellos dos están en pantalla.
Puede que Hazme el Favor sea una película poco original porque sigue muy de cerca la fórmula de su género, pero eso no le impide tomar algunos riesgos, de hecho su mera existencia en el panorama actual de la industria ya es uno. Además como ya lo mencioné, es una prueba de que el humor puede ser sucio, incorrecto, sin tener que llegar a lo repugnante y ofensivo. Pero el dúo protagonista es lo que verdaderamente lleva a la película a un punto en el que se convierte en algo especial, pues lo que logran Lawrence y Feldman se ve en una entre un millón de películas. Sin duda la mejor opción para ir al cine si lo que quieres es reír un buen rato y olvidarte de todo lo que está afuera. Eso sí, no la vean en familia.
Título original: No Hard Feelings
Dirección: Gene Stupnitsky
Guion: Gene Stupnitsky y John Phillips
Elenco: Jennifer Lawrence, Andrew Barth Feldman, Natalie Morales, Scott MacArthur, Ebon Moss-Bachrach, Laura Benanti y Matthew Broderick
Cinéfilo, crítico, swiftie y procrastinador profesional.