Reseña | ‘Boogeyman: Tu Miedo es Real’
Aunque funciona como una historia sobre el trauma, cae en lugares comunes del terror comercial que la vuelven predecible.

Sadie Harper (Sophie Thatcher) se encuentra lidiando con la reciente muerte de su madre, ocurrida por un accidente de coche, lo que provoca un ambiente de extrañeza en su casa. Su hermana menor, Sawyer (Vivien Lyra Blair, quien interpretó a la versión infantil de Leia en la serie Obi-Wan Kenobi) padece un temor profundo a la oscuridad, a la vez que se ha distanciado un poco de su padre, Will (Chris Messina), quien es un terapeuta psicológico. Aparte de esto, Sadie es incomprendida en la preparatoria donde va a la escuela, ya que claramente sus compañeros no saben cómo tratar con ella, llevando a algunas de sus compañeras a ser hostiles con ella. Este momento oscuro para Sadie y su familia, se comienza a materializar en el Boogeyman, un monstruo que se esconde en la oscuridad, y que adquiere fuerza y presencia conforme esta familia va desintegrándose.
La película Boogeyman: Tu Miedo Es Real, tiene como punto de partida el cuento The Boogeyman de Stephen King, publicado en 1973. Trata sobre una discusión entre un terapeuta y su paciente, quien le cuenta de la sospechosa muerte de sus tres hijos, pero que se las adjudica al monstruo del título, un ser que se esconde en los closets y que lo ha asediado por años. Esta conversación se lleva a cabo en una escena la película, pero curiosamente si el paciente es el protagonista del cuento corto y cuyo punto de vista es del cual vemos la historia, en la película es un personaje breve. Eso sí, interpretado por el reconocible David Dastmalchian, teniendo una conclusión diferente la escena en correspondencia con el cuento.
Similar a otros relatos o novelas de King, esta historia puede decirse que pertenece al género del terror, pero ante todo es un melodrama de personaje, donde la tragedia y los traumas de estos son representados a través de los monstruos que afrontan. Aunque King casi siempre termine dando finales luminosos a sus historias, y esto sea cediendo un poco más a lo emotivo y a la ingenuidad. El director Rob Savage junto con los guionistas que adaptan The Boogeyman, rescatan de manera incisiva la capa emocional, e incluso se puede decir que los mejores momentos de esta película tienen que ver con la relación que hay entre la familia protagonista y algunos momentos tanatológicos.
Es interesante que habiendo recientemente la idea y etiqueta de algo llamado “terror elevado”, cada vez sea más presente el matiz melodramático en las buenas películas de terror. Es el caso de las películas de Ari Aster como El Legado del Diablo o Midsommar, que son películas de personajes en duelos que se vuelven pesadillas. También ocurre con Sonríe de Parker Finn, que era una metáfora de la necesidad de disfrazar los problemas mentales en una sociedad como la nuestra. Dichas películas son magistrales por cómo provocan angustia a través de la inestabilidad de sus protagonistas, dejando un poco en segundo término las amenazas a o monstruos contra los que estos se estén enfrentando.
Boogeyman: Tu Miedo Es Real queda lejos de entrar en el rango de calidad de las películas previamente mencionadas, pero sería injusto ponerla en el nivel de películas comerciales del género que se quedan en algo más mediocre, solamente buscando escenas con jump scares. Aquí hay una película propositiva, aunque también una que llega a caer en lugares comunes y mucho menos ingeniosos.
Hay momentos que notoriamente buscan espantar o generar suspenso, y se vuelven predecibles cuando el espectador nota el recurso, quitándole efectividad a la experiencia. Más cuando la calma y el silencio se extiende de más, haciendo rezagar el ritmo en lugar de provocar tensión en el espectador. Lo que no es ayudado por el diseño del monstruo, que aquí se interpreta a Boogeyman como una suerte de bestia arácnida, que resulta en una apariencia que dista de ser original, aunque esto sea ayudado por la decisión plausible de mantenerlo en la oscuridad, para no tenerlo que ver tan directo. Lo más interesante con el concepto de este monstruo es que acecha a familias afligidas, y nuevamente esto está relacionado con el lado melodramático.
Esta es una película que cuando llega a funcionar es por el apego que uno pueda generar hacia los personajes, especialmente por las jóvenes protagonistas, tanto Sadie como Sawyer, que aparte de compartir una química genuina de hermanas, son las que se muestran más vulnerables al tema de la pérdida. Aquí pasa algo muy similar a la reciente Teléfono Negro de Scott Derrickson, que coincidentemente es adaptación de un relato corto de Joe Hill, hijo de Stephen King, que son películas que no funcionan tan bien como relatos de terror o suspenso, sino como historias de superación de la adversidad. Aunque termina siendo más consistente y efectiva la película de Derrickson.
Tenemos una película por demás perfectible, hay tramas que no se terminan de desarrollar, y la resolución de toda la historia llega a ser por demás predecible. Aunque al menos se le puede adjudicar que tiene un tratamiento mucho más interesante al que se le suele dar al cine de terror comercial. Sin embargo, hubiera sido interesante apegarse más a la esencia del cuento de King, no por un tema de fidelidad a la fuente, sino porque el cuento resulta más impactante al no saber qué tan real es el monstruo, o si este puede ser parte de la locura del narrador.
Título original: The Boogeyman
Dirección: Rob Savage
Guión: Scott Beck, Bryan Woods, Mark Heyman
Elenco: Sophie Thatcher, Chris Messina, Vivien Lyra Blair, David Dastmalchian, Marin Ireland, Madison Hu, Maddie Nichols.
François Truffaut decía que todos tenemos dos profesiones, a lo que nos dedicamos realmente y a ser críticos de cine. Soy camarógrafo y editor de video, pero ante todo soy cinéfilo y crítico de cine. Escribo y hablo de cine en mi página personal, Cinemacritic.