8 de diciembre de 2023

Una película de Álvaro Curiel que después de un largo paso por la televisión vuelve a dirigir un proyecto que retrata la vida en el metro de la Ciudad de México, desde el punto de vista de la gente que menos notamos.

Ernesto es un actor cubano reconocido solamente en su tierra natal que viaja a México con las esperanza de que un rol en teatro le abra las puertas a nuevas oportunidades, sin embargo, le arrebatan el papel, dejándolo varado en un país desconocido. Durante uno de sus viajes en metro, se da cuenta que una mujer pidiendo limosna es la misma que el día anterior, pero ahora su lesión es del brazo en lugar de la pierna. Ernesto se acerca a ella para ofrecerle ayuda con su actuación, sin saber que este encuentro lo llevará adentrarse en el mundo de los limosneros a quienes entrenará en su oficio para ganar dinero. Sin embargo pronto se dará cuenta de que se está involucrando con la gente equivocada.

Marioneta ofrece una premisa intrigante y muy original para el estándar del cine Mexicano, sin embargo, su ejecución es muy pobre y no le hace justicia al concepto. Desde el inicio no es excelente, los diálogos son modestos, la fotografía es buena, las actuaciones decentes, aun así, desde que arranca su trama principal, te atrapa, te hace preocuparte por su personaje principal, pues su ingenuidad y ego no le permite ver la gravedad de su situación. Es claro que Arturo Aranga y Álvaro Curiel tenían muy claro cual iba a ser su final, lo que no tenían claro, es cómo llegar ahí. Mientras avanza la película, más situaciones complicadas van apareciendo, pero también poca creatividad a la hora de resolverlas, dejando numerosas tramas al aire, dejándole muchas preguntas sin responder y no de una buena manera. Las incoherencias aumentan, los diálogos empeoran, las situaciones se vuelven absurdas y lo peor de todo, sumamente predecibles. Todo esto porque para la conclusión, Aranga y Curiel tienen que forzar un romance entre dos personajes y actores que no tienen absolutamente nada de química en pantalla, haciendo a un lado todo el contexto tan interesante de la Ciudad de México, una realidad que especulamos o conocemos sobre los limosneros y la red de corrupción que los controla, esta trama que serviría para hacer una denuncia del estado en el que viven un gran cantidad de personas hoy en día, queda en un segundo plano, porque claro que una historia de amor y un mensaje de superación personal es mucho más relacionable, fácil de realizar y transmitir en especial si tienes un final tan absurdo, pero ante todo motivador, en pocas palabras un: Y vivieron felices para siempre. Es frustrante que todo lo que hacía a la película tan diferente se tire por la borda para mantener un elemento tan común del cine mexicano.

Un punto que es sumamente importante para la película son las actuaciones, sin embargo la dirección de los actores no está a la altura de lo que el guión requiere, la idea es que cuando estos personajes comienzan a aprender actuar, mejoran en su trabajo y ganan más dinero, pero esto es poco creíble ya que ningún actor es convincente ni cuando actúan “mal” ni cuando actúan “bien”. El problema se agrava con los dos personajes principales, Ernesto y Belén, pues nos quieren hacer creer que hay un romance ahí, sin embargo cada vez que están juntos en pantalla, teniendo un momento romántico, parece que él la está acosando y que ella está sufriendo cada segundo que pasa a su lado. Por separado, Rafael Ernesto Hernández apenas y puede convencer en sus interpretaciones dentro de su interpretación, Fátima Molina se esfuerza a pesar de que el material para trabajar es pobre. La única actuación que resalta es la de Juan Manuel Bernal, pues se mantiene balanceado a pesar de que su personaje es una caricatura.

Álvaro Curiel en lugar de darnos un retrato del día a día de las personas invisibles en la Ciudad de México, prefiere presentar una historia de amor pobre y trillada. Aunque fallida, sigue siendo una propuesta un tanto diferente a lo que se ve comúnmente en el cine nacional y por lo que vale la pena echarle vistazo. Si no te molesta ninguna de las decisiones incoherentes de la cinta, puedes disfrutarla sin problemas.

Título original: Marioneta
Dirección: Álvaro Curiel
Guion: Arturo Arango & Álvaro Curiel
Elenco: Rafael Ernesto Hernández, Fátima Molina, Juan Manuel Bernal, Nicolasa Ortíz Monasterio, Manuel Poncelis, Patricia Reyes Spíndola, Damayanti Quintanar, Aleyda Gallardo, Mónica Dionne, Martha Claudia Moreno & Erando Gonzalez