Reseña | ‘Belascoarán’, Temporada 1
La serie cuenta con 3 nominaciones, incluyendo Serie del año, en los Premios Rolling Stone en Español.

El 12 de octubre del año pasado, a través de Netflix se estrenó una mini serie mexicana inspirada en las historias de Paco Ignacio Taibo II titulada Belascoarán, que pasó un poco desapercibida, pero que ahora retomamos por las nominaciones que se llevó en los Premios Rolling Stone en Español, las cuales son Actuación del Año (Luis Gerardo Méndez, Paulina Gaitán) y Serie del Año.
A finales de los años setenta en México, Héctor Belascoarán Shayne es un “ingeniero en tiempos de movimientos”, tiene un trabajo estable, una linda casa y una esposa, sin embargo no está satisfecho, su trabajo no le gusta, él ya no ama a su esposa y ella tampoco lo ama a él y así, viendo la ineficiencia de la policía del Distrito Federal, que “ni para dar susto sirven”, Héctor decide convertirse en Detective Independiente. Con la ayuda del plomero Gómez Letras, que es su vecino de oficina; su hermana Elisa y la hermosa muchacha de la cola de caballo, Belascoarán tendrá que resolver distintos casos en el Distrito Federal que lo harán encontrarse de frente con esta ciudad tan hermosa como desastrosa.
La serie brilla por su diseño de producción, cada decorado está cuidadosamente armado, los decorados exteriores exponen al Distrito Federal en todo su esplendor, con sus puestos de tacos en las esquinas, los quioscos de periódicos desde temprano y los autos cuadrados y coloridos, mientras que todos los interiores traen a la memoria las fotografías del álbum familiar, con las paredes en colores pastel, los muebles simplistas pero estilizados y las alfombras de patrones extravagantes, todo está diseñado para recordarnos esos tiempos donde un taco bien hecho costaba $2. La ambientación nos lleva a su propio Distrito Federal, lleno de color y vida que brilla aún más con el trabajo de la cámara, la cual se toma la libertad de hacer planos amplios, como si el camarógrafo intentara presumirnos el trabajo de sus compañeros, logrando que ambos terminen por impresionar al espectador, la cámara pocas veces está estática, ya sea siguiendo a algún personaje o mostrándonos alguna persecución, se aprovecha del Distrito Federal que la historia crea para hacerlo cálido a los ojos.
Luis Gerardo Méndez interpreta al Detective mexicano, con un tonito sumamente chilango que personalmente me hizo recordar cómo hablaba mi abuelo, según Méndez lograr ese tono fue complicado, pues las películas de la época no eran una representación precisa de la forma en que la ciudadanía común hablaba, por lo que se tuvo que volcar a revisar las grabaciones de radio de la época, las cuales le terminaron ayudando a crear esa característica voz. El resto de personajes tienen este mismo nivel en la interpretación, el plomero Gómez Letras, que se vuelve un gran aliado y amigo de Belascoarán, es interpretado por Silverio Palacios, quien logra mantener a un personaje divertido sin ir a lo ridículo, de algún modo es un chiste sobrio, pero para nada aburrido; Paulina Gaitán trae a la pantalla a Irene, la muchacha de la cola de caballo, una mujer tan fuerte como dulce y misteriosa y no hay mejor tema para introducirla que Fresa Salvaje de Camilo Sesto, que aunque puede estar un poco repetido, nunca pasa de moda; las mujeres fuertes resultan ser una constante en la vida de Belascoarán, pues su hermana Elisa, interpretada por Irene Azuela, es una mujer que si no se deja por una institución, mucho menos por un hombre.
El primer capítulo es una perfecta introducción de lo que trata la serie y de lo que Taibo II quería representar en sus libros, la historia se centra en un estrangulador que vaga por las calles del Distrito Federal, sin embargo las autoridades no hacen nada al respecto, haciendo que Belascoarán se decida a tomar el caso, como parte de su investigación decide participar en un programa de televisión hablando de estranguladores en la historia y hace una nota interesante “…somos tantos que crímenes horrendos ocurren todo el tiempo sin que nadie les preste atención, muchas veces…porque son tantos que ya los ignoramos por costumbre, por eso la mayoría de estos crímenes se quedan sin resolver”, esta cita es la síntesis perfecta del espíritu de la serie, no es una comedia de un mexicano queriendo ser como los detectives de las películas, al contrario, es el detective de película mexicanizado, de ahí el tono de voz, la oficina compartida con un plomero y la aparición de elementos tan mexicanos como los magos de capa y trajes extravagantes (episodio 2).
Aunque por momentos puede flaquear un poco y perder de vista este espíritu satírico y de crítica, la serie logra mantenerse señalando a la sociedad de la época que termina por resonar con la sociedad actual, no solo por las referencias y lugares, sino por la forma en que se abordan las temáticas y se exploran los casos.
Belascoarán nos dibuja un Distrito Federal muy peculiar que brilla por sí solo, mientras recuerda a esos viejos tiempos donde El Tri y José José llenaban las radios, al mismo tiempo que señala las problemáticas sociales que nos invaden hasta nuestros días con un tono divertido, pero para nada de mal gusto, tan elegante y cotidiano como puede ser este detective.
Título original: Belascoarán
Desarrollado por: Rodrigo Santos
Elenco: Luis Gerardo Méndez, Paulina Gaitán, Silverio Palacios, Irene Azuela, Enrique Arreola
Basado en: ‘Todo Belascoarán’ por Paco Ignacio Taibo II
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19 años
Estudiante de cine
Melómano