Reseña | ‘Stranger Things 4’ Volumen 2
El final mantiene las virtudes y errores de toda la temporada.

Hace poco más de un mes que se estrenó el primer volumen de la cuarta temporada de Stranger Things, el cual se sintió como una reinvención para la serie con una trama más complicada y en general una ejecución mucho más madura que todas las entregas anteriores. La emoción se vio interrumpida por la molesta e innecesaria decisión de separar la temporada en dos ‘volúmenes’, pero bueno, la espera terminó y ya hemos visto los últimos dos episodios de la cuarta temporada.
Estos dos últimos episodios mantienen perfectamente las virtudes de los anteriores y a la vez cargan con las mismas deficiencias. Esto era de esperarse ya que no es como que se hayan realizado estos episodios durante el mes de diferencia entre volúmenes, pero aún así había esperanza de que hubieran unas cuantas mejoras hacia el final. Al final parece que por cada buen paso que da la serie, hay un pequeño tropiezo que le impide ser excepcional.
Aún con la extrema duración de cuatro horas entre los 2 episodios, la trama es fluida y mantiene la tensión en gran parte de su duración. Es notable que la construcción de la historia fue minuciosa, no solo con la temporada en sí, sino que sus conexiones con las anteriores son claras y sólidas. O hay un plan desde el inicio de Stranger Things o han adaptado la historia perfectamente conforme avanzan. Sin embargo que los hilos se unan tan bien en la conclusión también permite observar cuales elementos no encajan, como la subtrama en Rusia que sigue a Hopper y Joyce. Esta ocupa una buena parte del metraje y al final no tiene un relevante impacto a la trama general. Era necesario ver a estos personajes, pero pudieron encajar mucho mejor.
Y eso nos lleva a seguir hablando de los personajes, así como lo prometía el Volumen 1, el mejor arco lo lleva Max. Una personaje que mantenía cierta distancia con el resto y la audiencia, pero que por fin nos permite conocer lo que verdaderamente piensa. Su historia tiene un final trágico, pero puede ser un punto clave para un aún mejor desarrollo para la última temporada.
Eleven también tiene un arco sólido que funciona por ser consistente con su viaje a lo largo de la serie, que la ha llevado a ser mucho más poderosa y más importante, confidente en sí misma. Sadie Sink y Millie Bobby Brown mantuvieron e incluso superaron el nivel de sus interpretaciones en la conclusión.
En realidad todo el elenco dio muy buenas interpretaciones, sin embargo el material que obtuvieron para sus personajes no fue concreto y en los últimos episodios no se hizo lo suficiente para que sus desarrollos concluyeran de forma satisfactoria. Hay espacio para cada personaje, pero de nuevo, el problema es quizá que con tantas subtramas es difícil mantener el hilo de cada uno. Cabe mencionar que la jugada de crear un personaje agradable cuya única función es morir trágicamente para sacar una lágrima fácil al público ya está gastada.
La cuarta temporada de Stranger Things es quizá la mejor hasta ahora, eso dependerá de la opinión de cada quien, sin embargo no se puede negar que se tomaron mejores decisiones para crear un mucho mejor producto, pero que sigue teniendo tantas deficiencias que le impiden acercarse a la grandeza. Aún así la vara está muy alta para la última temporada y los Hermanos Duffer tienen mucho que aprender de lo bien y mal que hicieron en esta entrega.
Cinéfilo, crítico, swiftie y procrastinador profesional.