Reseña | ‘King’s Man: El Origen’
Más dramática de lo necesario.

Mientras que un grupo compuesto por los peores tiranos y genios criminales se reúne para planear una guerra que hará desaparecer a millones, un hombre debe correr contra el tiempo para detenerlos.
Después del tibio recibimiento de la secuela de Kingsman, El Círculo Dorado, Matthew Vaughn abandonó momentáneamente los planes para hacer una trilogía y decidió entrar en una nueva historia que expandiera el universo de Kingsman. Es así como aparece King’s Man: El Origen, que como dice su título, nos cuenta la historia de como fue creada esta peculiar organización de espionaje.
Aunque ver esta historia de origen no era realmente la cosa más interesante de ver dentro del mundo de Kingsman, si causaba cierta curiosidad entre los fans, pues de cualquier forma tendríamos una película con acción intrépida y comedia ácida ¿Lo es? Debería pues así es como reconocemos a las otras dos entregas de Kingsman, sin embargo King’s Man: El Origen desde el inicio se presenta a si misma como un simple drama bélico.
Vaughn siempre ha puesto esfuerzo en crear personajes con los que podamos empatizar, esto viene de la mano de historias un tanto oscuras que se vuelven más fáciles digerir con la comedia. Esto último no es el caso de King’s Man: El Origen, pues como dije, parece estar escrita para ser una drama sobrio, en el que se nos habla de las dificultades que pasan las familias al encontrarse en el contexto de una guerra y como ellas mismas entran en conflicto al querer buscar la paz de diferentes maneras.
Y lo divertido de esto es, pues nada. Durante casi la mitad de su metraje, King’s Man se aferra a lo dramático de su historia, tanto que se nos llega al olvidar que esta es una comedia de espías. Pasando ya la mitad comienzan a haber más chistes, se alivia un tanto el tono, sin embargo se llega a sentir hasta fuera de lugar que haya situaciones graciosas en la película, es hasta incómodo.
La acción sigue siendo un gran fuerte en la dirección de Vaughn, me atrevo a decir que no se le ha apreciado tanto en este aspecto como se lo merece. Ralph Fiennes y Harris Dickinson entregan muy buenas interpretaciones, aunque es Rhys Ifans quien se roba la atención como Rasputin, además de ser el único actor que actúo para una comedia.
Si King’s Man: El Origen era un intento de mantener la franquicia viva y expandir sus productos, quizá sería bueno reconsiderar lo que están haciendo con ella pues hasta ahora solo han decaído en calidad. Seguramente habrá futuras entregas, que si bien tienen oportunidad de caer aún más bajo, ojalá sea lo contrario y devuelvan a la vida a Kingsman.
Título original: The King’s Man
Dirección: Matthew Vaughn
Guión: Karl Gajdusek & Matthew Vaughn
Elenco: Ralph Fiennes, Gemma Arterton, Rhys Ifans, Matthew Goode, Tom Hollander, Harris Dickinson, Daniel Brühl, Djimon Hounsou, y Charles Dance
Cinéfilo, crítico, swiftie y procrastinador profesional.